Taller para el manejo del trauma y el inicio de la resiliencia con excombatientes

El Instituto de Paz de Estados Unidos (USIP) y PASO Colombia se unieron para realizar el taller “Transiciones: Atendiendo a las heridas del alma” en el que excombatientes y personas que trabajan en el proceso de reincorporación aprendieron sobre el manejo del trauma y el camino de la resiliencia psicosocial.

El evento fue liderado por Carlos Fayard, PhD, psicólogo y profesor asociado de la Universidad de Loma Linda (California). Lo acompañaron Andrés Martínez, psicólogo y program manager for Religion and Inclusive Societies del Instituto de Paz de Estados Unidos (USIP) e integrantes de PASO Colombia, con el objetivo de integrar la discusión sobre la salud mental y el apoyo psicosocial a la construcción de paz. 

Durante el taller los participantes manifestaron que, por lo general en la ruta de la reincorporación, los problemas de salud mental y los traumas que han surgido tras décadas de conflicto, reciben poca atención por las instituciones encargadas de la implementación de los acuerdos de paz. El Dr. Fayard brindó algunas herramientas para comprender e identificar estas situaciones, y brindar primeros auxilios psicológicos a quienes lo necesiten. Así mismo, mostró que junto a las respuestas biológicas de cada persona, hay también un impacto en la espiritualidad y comprensión de la vida. Por eso, explicó cómo la espiritualidad, es una herramienta valiosa para superar las crisis y orientar la vida.

Los participantes coincidieron en que reconocer el estrés postraumático y las heridas morales permite a las comunidades prepararse de mejor manera para para atenderlos y guiarse en el camino de la resiliencia. Contribuyendo a que como colectivo puedan tomar mejores decisiones, tener liderazgos fortalecidos y estar orientados a un bien común en medio de sus distintos proyectos. Así, las nuevas comunidades que han surgido tras la firma del Acuerdo de Paz (veredas, AETCR, cooperativas, asociaciones y proyectos colectivos) pueden ser también espacios de diálogo que, en medio de la confianza y el compañerismo, permitan ir sanando esas heridas que han quedado guardadas en cada persona.